El 28 de agosto de 2023 comenzó esta aventura llamada temporada 2023/2024. Ese día echó a rodar oficialmente, ya que había comenzado antes a prepararse, el proyecto de la vuelta a casa de Charly Carreño. El nuevo Unicaja Costa de Almería tenía como misión principal devolver al club a las posiciones hegemónicas del voleibol español, y cumplidos 235 días de trabajo, hasta el 19 de abril, se puede confirmar que lo ha logrado con creces. De hecho, se ha alcanzado el objetivo histórico de jugar finales, una de las dos posibles, eso sí, y sin poder estar en la segunda por culpa de un punto de inflexión muy claro.

El 12 de abril se anunció el fichaje de Carreño al frente del primer equipo ahorrador, una persona histórica para la entidad verde como jugador, en gran medida, y de pasado como entrenador. En Unicaja Costa de Almería inició su carrera como técnico y, en los primeros compases con su nuevo rol dejó en las vitrinas dos Copas del Rey y una Supercopa, más el logro de la última final four europea. Dotado con una dilatada trayectoria posterior por muchos rincones del planeta, confirmó las primeras piezas del proyecto de su regreso a casa y terminó de darle forma para completar un equipo competitivo y ambicioso.

La primera semana de junio y la primera de julio adelantó trabajo respecto al ‘ensamble’ de piezas, llevando a cabo sendos ‘stages’ de verano con sus propios hombres fichados y con otros jugadores invitados a sesiones de entrenamiento. Así, para ese referido día 28 de agosto, inicio de la pretemporada, parte del camino ya estaba andado y, algo clave, desde el ‘minuto 1’ se comenzó a jugar al voleibol. Sin demasiados partidos preparatorios, sí con estancia en Lisboa mediante al habitual acuerdo con SL Benfica, al comienzo de la competición se llegó con un buen tono, mucho por hacer aun, pero ya en alto nivel.

El equipo ha acabado con solo una derrota en toda la temporada en el Moisés Ruiz en fase regular.

El debut fue el ‘soñado’, en casa, con victoria y ante un gran equipo como UPV Léleman Conqueridor. Fue el 7 de octubre y desde entonces se comenzó una magnífica marcha de resultados. La fase regular mostró a un Unicaja Costa de Almería muy poderoso, y de hecho el equipo la finalizó en segunda posición con 54 puntos y un balance de 18 victorias y 4 derrotas, aunque con otros datos sencillamente extraordinarios. Además de ser el que menos puntos encajó, con 1.584, alcanzó la imponente cifra de 12 partidos ganados por 3-0 o 0-3, a lo que cabe sumar que nunca se quedó sin hacer al menos un set.

Tres de sus cuatro derrotas fueron por 3-1 lejos del Moisés Ruiz, y la única en casa, frente a Guaguas, igualmente con ese marcador de 1-3. Curiosamente, no se jugó ningún tie-break a lo largo de 22 jornadas. Se ganaron cinco ‘finales’ tras la disputa de la Copa del Rey en un sprint final perfecto para finalmente firmar la segunda posición, incluido Grupo Herce Soria en Almería en el choque que decidía el factor cancha en los playoffs. Así, se llegó lanzado a las eliminatorias y se dejó notar en el 0-3 y el 3-0 con el que se superó a UPV Léleman Conqueridor en los cuartos de final, más fuertes todavía para la semifinal.

Se viajó con mucha confianza a Los Pajaritos y el comienzo del primer partido de la serie lo demostró con creces, cuajando un primer set excelente para tomar ventaja. El segundo pareció conducirse por los mismos derroteros, pero con un parcial de 11-15 llegó el calco a lo sucedido en fase regular en el mismo escenario, un apagón inoportuno y la pérdida de la manga, punto de inflexión absoluto de una eliminatoria que terminó de complicarse con lesión de Paulo Renán Bertassoni. No se logró retomar el juego, llegó la derrota y se tenía que hacer valer el factor cancha, pero el doble golpe anímico no se pudo remontar.

22 victorias y 7 derrotas

De creer en la final vigesimoquinta y dar los primeros pasos hacia ella, a quedarse con la miel en los labios, si bien ya se había jugado la de la Copa del Rey a finales de febrero. En el ‘Torneo del KO’ el equipo protagonizó un partido épico frente a Pamesa Teruel con el único tie-break de la temporada, logrando superar agónicamente los cuartos de final. En cuartos se remontó el primer set frente a Conectabalear CV Manacor con un rotundo voleibol, muy completo, y se llegó a la final número 22 de la historia del club. No pude ser la conquista del título, pero la imagen fue excelente, pese a ceder el único 3-0 del curso.

Así, en el año y una semana de Charly Carreño al frente de Unicaja Costa de Almería de nuevo, los números son para más de lo logrado, seguramente, pero el vóley se compone de muchos elementos, algunos incontrolables. En resumen, 22 victorias y 7 derrotas, con un coeficiente de sets muy bueno, 72 ganados y 30 perdidos entre las dos competiciones, o 58 a favor y 18 en contra en la fase regular, más los 14 triunfos por 3-0 o 0-3, una sola derrota sin sumar ninguna manga. Esa fue, como se ha referido, la final de la Copa del Rey, en la que también hubo un punto de inflexión, el 25-27 del primer set.

Con dos momentos muy concretos en sendos partidos, la final copera y el primero de la semifinal de la Superliga, incidiendo negativamente en las aspiraciones del equipo y del club, la temporada en números ha sido muy buena. Es cierto que también hubo otro punto de inflexión en el cuarto de final del ‘torneo del KO’, un 29-27 en el cuarto set para igualar el 0-2 a favor de Pamesa Teruel y llegar a un tie-break realmente brutal, ido al doble de los puntos reglamentarios, vencido por 28-26. Ser subcampeones de la Copa del Rey y finalizar terceros la Superliga, en todo caso, supone devolver a Unicaja Costa de Almería a su lugar habitual de más tres décadas consecutivas.